Según el Ministerio de Educación de Países Bajos, diversos estudios científicos han demostrado que los celulares son altamente adictivos, especialmente para los jóvenes cuyos cerebros están en pleno desarrollo. Estos dispositivos generan estímulos constantes, vibraciones y sonidos que dificultan la concentración y el aprendizaje efectivo.
La directiva establece que los celulares, tabletas y relojes inteligentes solo podrán ser utilizados en el aula si son necesarios para el contenido de la lección, como en el caso de clases de habilidades digitales. Sin embargo, las actividades como ver videos de TikTok, enviar mensajes o compartir fotos a través de Snapchat no estarán permitidas durante las clases.
Es importante destacar que esta directiva no es una prohibición legislativa, sino una recomendación a nivel nacional. Las escuelas tendrán la libertad de establecer sus propias reglas en consulta con profesores, padres y alumnos, aunque también tienen la opción de prohibir completamente el uso de celulares en sus instalaciones.
El ministro de Educación, Ciencia y Cultura, Robbert Dijkgraaf, ha respaldado la medida argumentando que los estudiantes deben poder concentrarse y tener todas las oportunidades para aprender de manera efectiva. Además, se ha considerado la situación de aquellos estudiantes que dependen de sus teléfonos por razones médicas o debido a alguna discapacidad, y se buscarán soluciones adaptadas en los centros que ofrecen educación especializada.
En resumen, la prohibición de celulares en las escuelas de Países Bajos es un paso importante para mejorar la concentración y el rendimiento académico de los estudiantes. Esta medida busca equilibrar el uso de la tecnología en el entorno educativo, garantizando un ambiente propicio para el aprendizaje. El Gobierno neerlandés espera que esta directiva contribuya a cerrar la brecha educativa y promover una educación de calidad.
Comentar esta noticia