En un trágico suceso que ha conmocionado a la ciudad de Moyobamba, una menor de 14 años ha tomado la devastadora decisión de quitarse la vida. La noticia ha dejado consternada a la comunidad local y ha planteado la urgente necesidad de abordar la salud mental y emocional de los jóvenes estudiantes.
Desgarrador hallazgo. Cuando la madre de la menor, una trabajadora del hospital de Moyobamba, regresaba a su hogar. Al ingresar al baño, hizo el macabro descubrimiento de encontrar a su hija colgada del cuello, con una soga atada a una viga. A pesar de los esfuerzos desesperados por rescatarla, ya era demasiado tarde.
Un hecho incomprensible. La menor, identificada con las iniciales E.M.V.M., cursaba el 3er grado de secundaria en el colegio Serafín Filomeno. Familiares, amigos y compañeros de la joven expresaron su dolor por la pérdida y se preguntan qué pudo haber llevado a la menor a tomar una decisión tan trágica. Se ha mencionado que dejó una carta dirigida a su madre, aunque aún no se conocen los detalles de su contenido.
Importancia de la prevención y el apoyo. Ante este lamentable suceso, es urgente que la Dirección Regional de Salud y la DRE - Dirección Regional de Educación unan esfuerzos para abordar la salud mental y emocional de los estudiantes. Es necesario implementar programas que prevengan y detecten a tiempo situaciones que puedan poner en riesgo la vida de los jóvenes.
La articulación de esfuerzos entre las instituciones educativas y de salud es fundamental para brindar apoyo y recursos necesarios a los estudiantes. Esto incluye la implementación de servicios de atención psicológica y emocional, así como la promoción de un entorno escolar que fomente el bienestar y la prevención del suicidio.
Esta tragedia nos invita a reflexionar sobre la importancia de estar atentos a las señales de malestar emocional en nuestros jóvenes. La comunidad en su conjunto debe comprometerse a brindar un ambiente seguro y comprensivo, donde los estudiantes se sientan apoyados y escuchados.
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