
Dada su importancia en la historia, en este artículo vamos a contarte todo sobre el imperio Tahuantinsuyo, haciendo un repaso a su historia, estructura, economía, religión y legado.
Orígenes y expansión del Tahuantinsuyo
El Tahuantinsuyo, que en quechua significa "las cuatro regiones unidas", tuvo su origen en el siglo XIII en el valle del Cusco, en lo que hoy es Perú. Según la leyenda, el imperio fue fundado por Manco Cápac y Mama Ocllo, quienes emergieron del lago Titicaca enviados por el dios sol Inti para civilizar a los pueblos andinos.Sin embargo, fue bajo el liderazgo de Pachacútec, el noveno gobernante inca, que el imperio comenzó su expansión significativa en el siglo XV.
Pachacútec no solo reorganizó el estado inca, sino que también inició una serie de campañas militares que permitieron la anexión de vastos territorios. A su muerte, el Tahuantinsuyo abarcaba desde el sur de Colombia hasta el centro de Chile y el norte de Argentina, incluyendo partes de Ecuador, Perú y Bolivia. Este vasto territorio estaba conectado por una extensa red de caminos, conocida como el Qhapaq Ñan, que facilitaba el control administrativo y militar del imperio.
Organización política y social
El Tahuantinsuyo estaba gobernado por el Sapa Inca, el emperador considerado hijo del dios sol Inti. El Sapa Inca ejercía un poder absoluto y era asistido por una élite de nobles y sacerdotes. El imperio estaba dividido en cuatro regiones principales, o suyos: Chinchaysuyo (norte), Antisuyo (este), Contisuyo (oeste) y Collasuyo (sur). Cada suyo estaba gobernado por un apu, un representante directo del Sapa Inca.La sociedad incaica estaba altamente estratificada. En la cúspide se encontraba la nobleza, compuesta por los familiares del Sapa Inca y los líderes militares y religiosos. Le seguían los curacas, líderes locales que actuaban como intermediarios entre el gobierno central y las comunidades. En la base de la pirámide social estaban los hatun runa, los campesinos y artesanos que constituían la mayoría de la población.
Economía y sistema de trabajo
La economía del Tahuantinsuyo se basaba en la agricultura, con cultivos como la papa, el maíz, la quinua y la coca. Los incas desarrollaron técnicas avanzadas de cultivo, como las terrazas agrícolas y los sistemas de riego, que les permitieron maximizar la producción en las difíciles condiciones geográficas de los Andes.Un aspecto único de la economía incaica era el sistema de la mita, un servicio laboral obligatorio que todos los ciudadanos debían prestar al estado. A cambio, el estado proporcionaba seguridad, alimentos y bienes básicos. Este sistema permitió la construcción de impresionantes obras públicas, como fortalezas, templos y caminos.
Religión y cosmovisión
La religión incaica era politeísta y estaba profundamente ligada a la naturaleza. El dios más importante era Inti, el dios sol, considerado el progenitor de los incas. Otros dioses importantes incluían a Viracocha, el creador del universo, y Pachamama, la madre tierra. Los incas creían que el Sapa Inca era el representante de Inti en la tierra, lo que legitimaba su poder divino.Los rituales religiosos eran una parte fundamental de la vida incaica. Estos incluían sacrificios de animales y, en ocasiones especiales, sacrificios humanos. Los incas también construyeron impresionantes templos y santuarios, como el Coricancha en Cusco, dedicado al dios sol.
Arquitectura y legado cultural
La arquitectura incaica es una de las más impresionantes de la América precolombina. Los incas eran maestros de la construcción en piedra, utilizando técnicas que permitían unir bloques de piedra sin mortero, de manera tan precisa que ni siquiera una hoja de papel podía deslizarse entre ellas.Ejemplos notables de esta habilidad incluyen la ciudadela de Machu Picchu, la fortaleza de Sacsayhuamán y el complejo religioso de Ollantaytambo.
Además de su arquitectura, los incas desarrollaron un sistema de contabilidad basado en los quipus, un conjunto de cuerdas con nudos que servían para registrar información numérica y narrativa. Aunque aún no se ha descifrado completamente su significado, se cree que los quipus eran una herramienta clave para la administración del imperio.
Caída del Tahuantinsuyo
La llegada de los conquistadores españoles en el siglo XVI marcó el inicio del fin del Tahuantinsuyo. En 1532, Francisco Pizarro capturó al Sapa Inca Atahualpa durante la batalla de Cajamarca.Aunque los incas resistieron ferozmente, la superioridad tecnológica de los españoles, combinada con las enfermedades traídas desde Europa y las divisiones internas dentro del imperio, llevaron a su caída definitiva en 1572, con la ejecución del último Sapa Inca, Túpac Amaru I.
En conclusión, el Tahuantinsuyo fue un imperio extraordinario que dejó un legado duradero en la historia de América. Su organización política, su ingeniería avanzada y su rica cultura continúan siendo objeto de admiración y estudio. Aunque el imperio cayó ante la conquista española, su influencia perdura en las tradiciones, la arquitectura y la identidad de los pueblos andinos.
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