La estrategia difiere del procedimiento anterior y ha levantado críticas por su falta de respeto al debido proceso.
CAMBIO EN LAS REGLAS DEL JUEGO
En una inusual maniobra, legisladores proponen la remoción sin seguir el proceso previamente establecido. Recordemos que en agosto, la Comisión de Justicia tuvo 10 días para investigar a la JNJ, resultando en un informe rechazado. Ahora, se busca omitir esta fase y proceder directamente con la destitución.
SUSPENSIÓN Y CONTRAATAQUE
La suspensión preventiva de su principal baluarte, Patricia Benavides, como fiscal de la Nación desató una serie de eventos. Jaime Villanueva, exasesor de Benavides y ahora colaborador eficaz, ha revelado supuestas negociaciones de votos a cambio de favores. Este contexto ha llevado a un sector del Congreso a intensificar los intentos de control sobre la JNJ.
RIESGO DEMOCRÁTICO
La JNJ, en un comunicado, advierte que la destitución inmediata sería un "quiebre del régimen democrático" y un "atentado contra la legitimidad constitucional". Se plantea la posibilidad de consecuencias imprevisibles para la república si la moción tiene éxito, cuestionando la prudencia y legalidad de esta nueva iniciativa.
INCERTIDUMBRE EN LAS BANCADAS
Las bancadas, consultadas sobre su posición, aún no definen un consenso. La incertidumbre reina en Alianza para el Progreso, Perú Libre, Perú Bicentenario, y entre los no agrupados. Las declaraciones de sus representantes sugieren cautela y análisis antes de tomar una posición definitiva.
RESPUESTAS DIVERGENTES
Las reacciones dentro del Congreso son divergentes. Algunos parlamentarios expresan la necesidad de revisar el marco legal antes de tomar una decisión, mientras otros muestran su apoyo a la destitución basándose en argumentos cuestionables. La clave será alcanzar los 87 votos necesarios para proceder con la destitución.
Comentar esta noticia