Tacna. El centro poblado Maure Kallapuma, ubicado cerca al límite con Puno, reclama por la educación de sus niños durante la pandemia de la COVID-19. Son ocho anexos que carecen de señal de internet, radio y televisión peruana. Su única esperanza es captar la señal de internet con la que cuenta Bolivia gracias a sus antenas.
Las comunidades afectadas por el olvido del Gobierno Central y las autoridades locales son Vilacota, Quilviri, Tacjata, Kovire Chilicollpa, Ancuyo Challapalca, Mamuta, Kallapuma, Chiluyo y Conchachiri. El teniente gobernador de ese último anexo, Tomás Mamani, manifestó su preocupación por los niños.
"En Conchachire hay dos niños sin educación desde que inició la pandemia (...) hace dos meses el alcalde de la provincia nos visitó, nos dijo que se iba a instalar una repetidora de radio nacional. Se comprometieron a construir la caseta y hasta ahora no hay nada", declaró Mamani.
El teniente gobernador de Chiluyo Grande, Benancio Miranda, explicó que en su jurisdicción, al igual que el resto de comunidades, carecen de energía eléctrica y agua potable. Recordó que presentó varios documentos solicitando a las autoridades paneles solares, pero siempre fue ignorado. Llegó la pandemia y al menos en su zona, cinco menores de edad que son afectados.
El alcalde del poblado Maure, Policarpio Ururi, convocó el viernes a una conferencia para advertir problemas de limítes con Puno. Piden delimitación definitiva para poder invertir.
Comentar esta noticia