A continuación, conoce las claves para la entrega de este beneficio entregado por el Estado a las familias afectadas por el impacto económico de la pandemia del covid-19.
Del total de población beneficiada en la zona rural, el 56.9 % reside en la sierra, el 26.8 % en la selva, el 15.2 % en la costa, y solo el 1.1 % en Lima Metropolitana.
Asimismo, el 37.7 % de los beneficiarios (un millón 156,580 hogares) son usuarios de los programas sociales, frente a un 62.3 % que no lo son.
La entrega del segundo Bono Familiar Universal comenzará, en primer término, con el abono a 1 millón 231,000 hogares pertenecientes a los programas sociales, en cuyas cuentas del Banco de la Nación o de bancos privados se realizará el depósito.
A continuación se efectuará el pago a través de los "carritos pagadores" de las empresas transportadoras de valores (ETV) que se trasladarán hasta las zonas rurales e incluso hasta los domicilios de las personas mayores de 80 años de edad, para que no tengan que desplazarse a cobrar el bono.
El pago también se ejecutará a través de las Plataformas Itinerantes de Acción Social (PIAS), lo que permitirá llegar a las zonas amazónicas que no se logró atender en los pagos de los anteriores bonos.
Como ocurrió con los bonos anteriores, se usarán otros mecanismos como la banca celular y la billetera digital, además de los giros y los pagos directos que se ha previsto ejecutar en colegios y estadios.
Para optimizar la cobertura de los beneficiarios, el Midis ha mejorado el filtro cruzando su información con la base de datos del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) y la Encuesta Nacional de Hogares del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
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