Santo Padre reconoce su aporte a Iglesia latinoamericana: Más allá de pertenecer al mismo continente y de hablar el mismo idioma, el Papa Francisco tiene un lazo especial con el Perú por los santos peruanos, cuya devoción traspasa las fronteras y que han sido mencionados por el Sumo Pontífice en distintas ocasiones.
Múltiples han sido las expresiones del Santo Padre hacia Santa Rosa de Lima y San Martín de Porres, a los que, en un mensaje dirigido a nuestro país, con motivo de su próxima visita, los llamó "la reserva más linda que tiene el Perú".
"Ellos marcaron a Latinoamérica e hicieron la construcción de la Iglesia. De la dispersión a la unidad, un santo siempre trabaja en esa línea que es lo que hizo Jesús, un cristiano tiene que seguir ese camino: trabajar por la unidad", dijo Francisco en ese mensaje.
Un lirio entre las espinas
La entrega a Dios de Santa Rosa de Lima, conocida como la Patrona de América y de las Filipinas, ha sido una de las virtudes más destacadas por el Papa Francisco. "Creció como lirio entre las espinas, se hizo amiga del Señor desde la infancia, a tal punto que ya desde pequeña le consagró su virginidad y empezó a cultivar las virtudes".
Estas apreciaciones las formuló en el mensaje que envió con motivo de la Celebración Eucarística de clausura por los 400 años de la muerte de Santa Rosa de Lima.
"Desde pequeña, inflamada por el ejemplo e intercesión de la Beatísima Virgen María y de Santa Catalina de Siena, ofreció completamente su vida a Dios, vistiendo el hábito de las Hermanas de la Tercera Orden Regular de los Predicadores, entregada a la penitencia y a la oración, y ardiendo de pasión amorosa por ganar para la vida eterna en Cristo a todos, pecadores e indígenas", señaló en su mensaje.
Santa Rosa de Lima, la primera santa de América, fue canonizada en 1671 por el Papa Clemente X y declarada Patrona del Perú, del Nuevo Mundo y de las Filipinas.
La escoba, su símbolo de humildad
En mayo de este año, Jorge Mario Bergoglio, nombre original de Francisco, recibió la imagen de San Martín de Porres de manos de los obispos peruanos. Los miembros de la Conferencia Episcopal Peruana llegaron al Vaticano con la imagen del santo peruano enmarcada en pan de oro.
Al recibir el obsequio, el Papa Francisco les recordó que mientras algunos religiosos son devotos de santos o de la ecología, él lo era de la escoba.
Nacido en Lima en 1579 bajo el nombre de Martín de Porres Velásquez, conocido más tarde como San Martín de Porres, su figura fue también ensalzada por el Sumo Pontífice, quien con ocasión de un aniversario de su muerte, exhortó a los católicos a no dejarse seducir por la vanagloria.
Al contrario, invitó a seguir el ejemplo del primer santo negro de América Latina, "el humilde fraile dominico", que actuó siempre con espíritu de concordia y vocación de servicio a los demás.
Cristo de Pachacamilla
La devoción que Francisco siente por el Señor de los Milagros y su cercanía a esta venerada imagen es tal que dentro de la agenda que cumplirá en el país ha incluido el Rezo de la Hora Tercia con religiosas de vida contemplativa en el santuario de las Nazarenas.
Además, el Cristo de Pachacamilla presidirá la misa que oficiará en la base aérea de Las Palmas, con lo que cerrará su agenda en el Perú.
Y es que el sacerdote Jorge Mario Bergoglio fue director espiritual de la Hermandad del Señor de los Milagros de la provincia de Mendoza, en Argentina, su país natal. Por ello, la hermandad le obsequiará en Lima una réplica del cirio oficial del Cristo Morado, elaborado con cera especial y pan de oro.
En el 2010, cuando fue arzobispo de Buenos Aires, celebró una misa ante la sagrada imagen del Cristo Moreno y desde que inició su pontificado permite el ingreso del anda morada a la basílica de San Pedro el último domingo de octubre.
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