La actriz y cantante peruana Magaly Solier será nombrada el 26 de junio Artista para la Paz de la Unesco "en reconocimiento a su compromiso para proteger y promover las lenguas indígenas y la música indígena a lo largo de su carrera artística y su dedicación a los ideales y objetivos universales de la Organización".
La Directora General de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), Irina Bokova, formalizará dicho nombramiento, según el comunicado de la organización, que destaca el compromiso de Magaly Solier por la paz, los derechos humanos, la justicia social, la protección del medio ambiente y el derecho a la educación en la lengua materna.
"Sus creaciones expresan también su apoyo a la lucha contra la desigualdad de género y la violencia machista. Entre sus cometidos como Artista para la Paz de la Unesco figurará la promoción del Año Internacional de las Lenguas Indígenas, que se celebrará en 2019, y del Atlas de las Lenguas de la Unesco, actualmente en preparación", indica el pronunciamiento.
Nacida en la provincia de Huanta (Ayacucho), Magaly Solier Romero es quechuahablante y creció participando en labores del campo con sus padres y hermanos. Su carrera musical surgió en 2003, año en que ganó el Festival de la Canción Ayacuchana. Un año después, debutó en el cine con un papel en la película Madeinusa, de la realizadora Claudia Llosa, con el que ganó el premio a la mejor actriz en el Festival de Cine de Cartagena de Indias (Colombia) y el Festival Ibero-Latinoamericano de Montreal (Canadá).
En 2009, su papel en el filme La Teta Asustada, también de Claudia Llosa, la hizo célebre internacionalmente. A él siguieron papeles en Altiplano, de Peter Brosens y Jessica Woodworth, y Amador, de Fernando León de Aranoa, con el que ganó el premio a la mejor actriz en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara (México). Al mismo tiempo, editó su primer disco, Warmy, interpretado casi exclusivamente en quechua y galardonado con el Premio al mejor álbum musical en Perú.
En 2014 lanzó su segundo álbum, Coca Quintucha que reúne temas tradicionales de los Andes interpretados en quechua. Con ese disco realizó varios conciertos en los que interpretó canciones en quechua, aymara, ashaninka y muchik.
Los Artistas para la Paz son personalidades reconocidas internacionalmente que usan su influencia, prestigio y carisma para ayudar a la Unesco a promover sus mensajes y programas. La Organización trabaja con ellos para llamar la atención y sensibilizar al público sobre aspectos clave del desarrollo y para informar a la sociedad sobre su acción en estos ámbitos.
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